viernes, 6 de noviembre de 2015

¿Somos Todos Hijos de Dios?

Autor del Tema:  Edgar Rafael Agueta Calderon

"Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;" (Juan 1:12)

"en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad," (Efesios 1:5)

Por muy fuerte que suene, si no eres hij@ de Dios eres hij@ del diablo, una de las 2, y la mayoría tienen por padre a satanas.

"Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira." (Juan 8:44)

Existen algunas opiniones muy generalizadas de la gente con respecto al concepto de ser hijos de Dios, en este mensaje vamos a cotejar algunas opiniones de la gente y los que nos enseña la Biblia acerca de esto.

a) Muchas personas opinan que todos los seres humanos somos hijos de Dios, basándose para esto en la creación que Dios hizo del hombre (Génesis 1:27)

b) Otras gentes dicen que sólo nuestro Bendito Señor y Salvador Jesucristo puede ser el Hijo de Dios (Juan 3:16)

Artículo Subido al Facebook por la Hermana, Adriana Mercado



c) Y algunos hasta se atreven a decir, que ninguno de los seres humanos nacidos en este planeta puede llegar a ser legítimamente un hijo de Dios...Así que mejor vamos a ver a la luz de las Sagradas Escrituras lo que nuestro Dios nos revela acerca de esto.

1. EL ORIGEN DE LOS HIJOS DE DIOS.

En el sentido espiritual, la Biblia nos enseña de tres clases diferentes de hijos, vamos a verlo en el siguiente orden:

a) LOS HIJOS DE DIOS: Dice en Juan 1:11-13 " A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.(refiriéndose a Cristo)(12)Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;(13)los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios." Entonces podemos ver que conforme a la palabra de Dios, los que han creído en Cristo y lo han aceptado como su único y suficiente Salvador, son convertidos a través de ésta Fe, en auténticos Hijos de Dios. A los hijos de Dios se les conoce también como: "Los hijos del Dios Viviente" (Romanos 9:26)."hijos del Altísimo"(Lucas 6:35)."hijos de Luz"(Juan 12:36)"hijos del Reino"(Mateo 13:38).

b) LOS HIJOS DE IRA: La Biblia nos enseña en Efesios 2:3 que las personas que no han recibido a Cristo en su corazón son hijos de ira, y estan en condenación al vivir conforme a sus deseos carnáles; dice así:"...también nosotros vivíamos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás."

c) LOS HIJOS DEL DIABLO: La Biblia nos enseña que estos son los que aborrecen el Evangelio y se oponen totalmente a Cristo. vemos en Juan 8:44 lo que Cristo les dijo a los que se oponían a su Palabra,"Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer, el ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él, cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso y padre de mentira."



2. LA NATURALEZA DE LOS HIJOS DE DIOS.

La Palabra de Dios nos enseña que ÉL viene a ser verdaderamente Padre de aquéllos que aceptan el evangelio de nuestro Señor Jesucristo y como lo hemos visto en Juan 1:12-13 el Cristiano es nacido de el.

a) Vemos en Juan 3:3,5,6,8 como se efectúa éste nuevo nacimiento. Dice así:"Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo no puede ver el Reino de Dios.(5)Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del espíritu, no puede entrar en el Reino de Dios.(6)Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.(8)El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu."

b) Este nuevo nacimiento espiritual se efectúa cuando una persona a creído real y sinceramente en la Palabra de Dios, habiendo aceptado a nuestro Señor y Salvador Jesucristo, como el único y suficiente Salvador de su alma. Dice en Santiago 1:18 "El, de su voluntad. nos hizo nacer por la Palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas." También dice en 1 Pedro 1:23 "Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la Palabra de Dios que vive y permanece para siempre."



3. LA FORMA DE VIDA DE LOS HIJOS DE DIOS.

La Palabra de Dios, también nos enseña la forma en que viven los verdaderos hijos de Dios; vamos a ver esto en la Biblia en el siguiente orden:

a) Ofrendan sus vidas a Dios, para su Gloria y Alabanza. Isaías 43:7 "Todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los he creado, los formé y los hice."

b) Procuran en todo lo que les es posible dirigir sus vidas en santidad, apartándose de todo pecado y de todo lo que sea contrario a la sana doctrina Evangélica. 1 Pedro 1:14-17 "Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teniáis estando en vuestra ignorancia.(15)sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir.(16)Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo,(17)Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación."

c) Los hijos de Dios tienen como misión específica anunciar el Evangelio a todas las personas que el Señor ponga a su alcance. 1 Pedro 2:9 "Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable"

d) Los hijos de Dios, Viven con la paz de Cristo en su corazón, poniendo toda su Fe en Dios para la solución de todo tipo de problemas que se les presenten, sabiendo que como hijos de Dios ÉL está al pendiente de nuestras necesidades. Mateo 6:31-33 "No os afanéis, pues, diciendo:¿que comeremos. o que beberemos, o que vestiremos? (32)Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.(33)Mas buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas."



e) Los hijos de Dios, viven esta vida en plena certidumbre de Fe, esperando la venida del Señor, confiados de que ese día recibirán la recompensa que Dios a prometido a todos los Cristianos verdaderos. 2 Timoteo 4:7-8 "He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la Fe.(8)Por lo demás me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mi, sino también a todos los que aman su venida."

4. LOS PRIVILEGIOS DE SER HIJOS DE DIOS.

Esto queremos ilustrarlo de una manera hermosa a través del Salmo 23.

a) Los hijos de Dios, viven bajo el cuidado y protección total del Omnipotente. Salmo 23:1 "Jehová es mi Pastor; nada me faltará."

b) Los hijos de Dios, disfrutan de la paz que siente un Bebé infante en los brazos de su madre. Salmo 23:2 "En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará."

c) Los hijos de Dios son confortados en sus momentos de dificultad y Dios los conduce por caminos de justicia. Salmo 23:3 "confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre."

d) Los hijos de Dios viven completamente tranquilos, ya que aunque vengan tiempos de enfermedad, peligro o aun la misma muerte física, saben que no están solos, Dios esta con ellos. Salmo 23:4 "Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento."



e) Los hijos de Dios, se sienten llenos de gozo, por la seguridad que Dios les da en la victoria sobre todo mal. Salmo 23:5 "aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando."

f) Por último podemos ver en el Salmo 23:6 ¡la culminación, la esencia de la Fe, la esperanza viva! de todos los Cristianos verdaderos. ¡¡¡ Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida ,Y en la casa de Jehová moraré por largos días.!!! ¡amen! ¡Gloria a Dios! ¡que bueno es el Señor! ¡aleluya!

CONCLUSIÓN:

Hermano hermana, amigo amiga, que escuchas o lees este mensaje, yo quiero decirte que si ya eres hijo de Dios, guarda tu dignidad como tal, no te olvides que eres hijo del Señor, Dios y Rey de todo el universo y mantente firme en la Fe hasta el día de tu encuentro con ÉL. Pero si tú, amigo o amiga no has aceptado a Cristo, yo te invito en este momento a que lo aceptes hoy mismo, como tu Salvador y disfruta ya de este maravilloso privilegio que es el ser hijo del DIOS VIVIENTE, EL TODOPODEROSO, EL CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA. " AMEN"

Las Religiones que han Adulterado la Palabra de Dios

Autor del Tema:  Edgar Rafael Agueta Calderon

Están llevando muchas vidas, a la muerte y condenación eterna, Judas 1:17-23

No podemos aceptar todo lo que escuchamos como la verdad, tenemos que comprobarlo a la luz de la Palabra de Dios.

Hermana, Adriana Mercado, quien colocó el tema en FACEBOOK



Es una pena ver como existen tantos que creyendo estar bien se encuentran tan mal. Es una pena ver como muchos han sido desviados de la verdad de Dios, pero más penoso aun es ver como existen tantos que conociendo la verdad, no están dispuestos a confrontar el enemigo.



El peligro que todo creyente corre es ser seducido o convencido por falsos maestros, el peligro que todo creyente corre es ser convencido por filosofías y teorías, dogmas o tradiciones religiosas que buscan remplazar la verdad de Dios. ¿Qué podemos hacer para evitar el peligro? Lo que tenemos que hacer es edificar y fortalecer nuestra fe estrictamente basado en la Palabra de Dios.



Como creyentes fieles tenemos que declarar el verdadero evangelio de Jesucristo; tenemos que convencer a aquellos que nos rodean de la verdad de Dios. Existe un gran número de personas en éste mundo que han sido confundidas, seducidas, y convencidas por falsas enseñanzas. Existe un gran número de personas sentadas y apoyando congregaciones y ministerios donde no se predica la verdad de Dios. La Palabra nos dice: “A otros salvad, arrebatándolos del fuego.” ¿Cómo podemos arrebatar a otros del fuego? Lo hacemos enseñando la verdad de Dios, revelando así la mentira del diablo.



Efesios  5:14 Despiértate tu que duermes y te alumbrara cristo.


1 Pedro 2:2 desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación,

Tesalonicenses Padecimiento y Deber Cristiano

Pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo

1 Tesalonicenses 1:5, 6  pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros. Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con gozo del Espíritu Santo,



Cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo

1 Tesalonicenses 1:9, 10  porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos recibisteis, y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero,  y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera. 



Pues habiendo antes padecido y sido ultrajados en Filipos

1 Tesalonicenses 2:2, 6  pues habiendo antes padecido y sido ultrajados en Filipos, como sabéis, tuvimos denuedo en nuestro Dios para anunciaros el evangelio de Dios en medio de gran oposición. Porque nuestra exhortación no procedió de error ni de impureza, ni fue por engaño,  sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones. Porque nunca usamos de palabras lisonjeras, como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es testigo; ni buscamos gloria de los hombres; ni de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.


  

Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios

1 Tesalonicenses 2:8, 10  Tan grande es nuestro afecto por vosotros, que hubiéramos querido entregaros no sólo el evangelio de Dios, sino también nuestras propias vidas; porque habéis llegado a sernos muy queridos. Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios. Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes;



Pues habéis padecido de los de vuestra propia nación las mismas cosas que ellas padecieron de los judíos,  los cuales mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos expulsaron; y no agradan a Dios

1 Tesalonicenses 2:14, 16  Porque vosotros, hermanos, vinisteis a ser imitadores de las iglesias de Dios en Cristo Jesús que están en Judea; pues habéis padecido de los de vuestra propia nación las mismas cosas que ellas padecieron de los judíos,  los cuales mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos expulsaron; y no agradan a Dios, y se oponen a todos los hombres,  impidiéndonos hablar a los gentiles para que éstos se salven; así colman ellos siempre la medida de sus pecados, pues vino sobre ellos la ira hasta el extremo.



Para confirmaros y exhortaros respecto a vuestra fe,  a fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos

1 Tesalonicenses 3: 2, 5  y enviamos a Timoteo nuestro hermano, servidor de Dios y colaborador nuestro en el evangelio de Cristo, para confirmaros y exhortaros respecto a vuestra fe,  a fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos.  Porque también estando con vosotros, os predecíamos que íbamos a pasar tribulaciones, como ha acontecido y sabéis. Por lo cual también yo, no pudiendo soportar más, envié para informarme de vuestra fe, no sea que os hubiese tentado el tentador, y que nuestro trabajo resultase en vano.

Por  ello, hermanos, en medio de toda nuestra necesidad y aflicción

1 Tesalonicenses 3:7  por ello, hermanos, en medio de toda nuestra necesidad y aflicción fuimos consolados de vosotros por medio de vuestra fe;

Pues  la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación;   que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor

1 Tesalonicenses 4:3- 8  pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación;   que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor;  no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios; que ninguno agravie ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado. Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación. Así que, el que desecha esto, no desecha a hombre, sino a Dios, que también nos dio su Espíritu Santo.

Y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado

1 Tesalonicenses 4:11, 12  y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado,  a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada.

Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza

1 Tesalonicenses 4:13, 14  Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.  Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.

La Venida del Señor

1 Tesalonicenses  5: 2, 3  Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche;  que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.

Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas.  Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.

1 Tesalonicenses  5:5- 9  Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas.  Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.  Pues los que duermen, de noche duermen, y los que se embriagan, de noche se embriagan. Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo.  Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo,

También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos

1 Tesalonicenses  5:14, 15  También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.  Mirad que ninguno pague a otro mal por mal; antes seguid siempre lo bueno unos para con otros, y para con todos.

No apaguéis al Espíritu. No menospreciéis las profecías

1 Tesalonicenses  5:16- 22  Estad siempre gozosos. Orad sin cesar.  Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.  No apaguéis al Espíritu. No menospreciéis las profecías. Examinadlo todo; retened lo bueno. Absteneos de toda especie de mal.

Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible

1 Tesalonicenses  5:23  Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.

Tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis

2 Tesalonicenses 1:4- 10  tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis. Esto es demostración del justo juicio de Dios, para que seáis tenidos por dignos del reino de Dios, por el cual asimismo padecéis. Porque es justo delante de Dios pagar con tribulación a los que os atribulan,  y a vosotros que sois atribulados, daros reposo con nosotros, cuando se manifieste el Señor Jesús desde el cielo con los ángeles de su poder, en llama de fuego, para dar retribución a los que no conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo; los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder,  cuando venga en aquel día para ser glorificado en sus santos y ser admirado en todos los que creyeron (por cuanto nuestro testimonio ha sido creído entre vosotros).

Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición,   el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.


2 Tesalonicenses 2:1- 4   Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos,  que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca.  Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición,   el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.

.Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio

2 Tesalonicenses 2:6- 12  Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su debido tiempo se manifieste. Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio.  Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida;  inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos,  y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.  Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira,  a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia.

Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido

2 Tesalonicenses 2:15  Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra.

Y  para que seamos librados de hombres perversos y malos

2 Tesalonicenses 3:2, 3  y para que seamos librados de hombres perversos y malos; porque no es de todos la fe.  Pero fiel es el Señor, que os afirmará y guardará del mal.

Que  os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según la enseñanza que recibisteis de nosotros

2 Tesalonicenses 3:6, 7  Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según la enseñanza que recibisteis de nosotros. Porque vosotros mismos sabéis de qué manera debéis imitarnos; pues nosotros no anduvimos desordenadamente entre vosotros,

Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.

2 Tesalonicenses 3:8- 10  ni comimos de balde el pan de nadie, sino que trabajamos con afán y fatiga día y noche, para no ser gravosos a ninguno de vosotros; no porque no tuviésemos derecho, sino por daros nosotros mismos un ejemplo para que nos imitaseis. Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.